Duro por naturaleza
Un tallo de cáñamo está compuesto por haces de fibras rígidas unidas por pegamentos naturales llamados ligninas que les permiten crecer largas y fuertes. En los materiales tejidos, esto se traduce en una alta resistencia a la tensión y durabilidad.
Listo para usar
Como textil, el cáñamo tiene una caída natural y una alta transpirabilidad sin sacrificar la durabilidad y la resistencia a la abrasión. Comodidad lista para ser usada desde el primer día.
Testeado en el tiempo
Durante siglos, el cáñamo ha sido un medio de confianza para aparejar cuerdas, velas de barcos y lonas.
Rehabilitación del suelo
La larga raíz central del cáñamo penetra profundamente, incluso en los suelos más duros y con menos nutrientes, extrayéndolos junto a los microbios que regeneran el suelo.
Resistente a la sequía
El cáñamo prospera con poca o ninguna irrigación: ahorra dinero y ahorra suelo.
Crece como una hierba
El cáñamo no necesita ningún fertilizante sintético y requiere menos fertilizante natural que otros cultivos. Debido a que crece rápidamente y crea su propia sombra en el dosel, mantiene naturalmente las malezas al mínimo.